
TARTA DE YOGUR Y FRESAS
Ingredientes:
200 gramos de galletas
100 gramos de mantequilla
250 gramos de yogur
300 mililitros de nata para montar (crema de leche)
100 mililitros de leche
5 láminas de gelatina
100 gramos de azúcar (½ taza)
Preparación:
Para preparar la tarta de yogur con fresas lo primero que debes hacer es hidratar las láminas de gelatina en un bol con agua fría. Déjalas unos 10 minutos. Mientras tanto, trocea las galletas y tritúralas en un robot de cocina. También se pueden triturar poniendo las galletas en una bolsa y pasando un rodillo por encima o dándole golpes hasta que queden trituradas. Si quieres hacer la tarta de yogur y fresas totalmente casera, prepara tus propias galletas con esta receta: "Galletas de mantequilla faciles". Pon la mantequilla en un bol y métela en el microondas unos segundos para que se deshaga. Coloca las galletas trituradas en un bol, añade la mantequilla derretida y mezcla. Con esta mezcla de galletas y mantequilla cubre el fondo de un molde desmontable de 18 cm de diámetro. Presiona bien para que quede bien compacta al molde y déjalo en la nevera mientras preparas el relleno. Monta la nata en un bol con unas varillas eléctricas, preferiblemente. Añade el azúcar poco a poco y sin dejar de batir. Resérvala. Vierte la leche en otro bol y caliéntala un poco en el microondas o al fuego. Escurre bien las hojas de gelatina, añádelas a la leche caliente y mezcla hasta que se derritan por completo.Incorpora el yogur a la leche e integra estos ingredientes. Puedes hacer la tarta de yogur y fresas con yogur griego, yogur natural sin azúcar e, incluso, yogur de fresa si quieres potenciar el sabor de este alimento. Agrega la mezcla anterior a la nata montada y mezcla con movimientos envolventes para que la nata no se baje. Saca el molde de la nevera, introduce la mezcla sobre la base de galletas, alisa bien la superficie y deja la tarta en el frigorífico durante 3-4 horas para que cuaje. Si puedes dejarla una noche entera mejor. Lava las fresas y córtalas en rodajas finas algunas y otras en trozos más grandes. Saca el molde de la nevera, desmolda la tarta cuando esté bien cuajada y ponla en una fuente de servir. Coloca las rodajas en el borde de la tarta con la base plana abajo y el pico de la fresa arriba. Si tienes dificultades para pegar las fresas a la tarta, puedes humedecer con agua la fruta o utilizar un poco de nata montada a modo de pegamento. Los trozos más grandes de fruta déjalos para decorar la superficie. ¡Y listo!